Ya os hemos contado en alguna ocasión que nos chiflan las plantas (la costilla de adán, los cactus, las suculentas…). Aportan mucha vida a cualquier rincón de la casa y además de esto sirven para decorar. El inconveniente es que no tenemos mucha mano para ellas y en ocasiones se nos mueren. De ahí que, recientemente procuramos buscar siempre y en toda circunstancia plantas de interior y que sean muuuuuy simples de cuidar, a fin de que subsistan a unas catastróficas como nosotras.
Y hace muy poco nos charlaron de la sanseviera (o bien lenguas de suegra, ¡vaya nombre!), una planta bastante resultona y poquísimo exigente en lo que a cuidados se refiere. Además de esto, cuando la procuramos nos percatamos de que la habíamos visto ya en casa de nuestras abuelas ( sí que sabían), y nos trajo tantos recuerdos que nos enamoraron por completo.
Os dejamos un tanto de inspiración:
Como veis, la sanseviera luce bien en recibidores, salones, dormitorios… Nosotras nos hemos encaprichado y estamos seguras de que va a ser nuestra próxima inquilina. Y , ¿conocéis alguna otra planta buena, bonita y resistente?
¡Feliz lunes, bonitistas!