¿Eres de las que prosiguen a rajatabla los hábitos de limpieza? No dudamos, mas al tiempo que ciertas labores apenas tienen influencia en el estado general de tu hogar (por poner un ejemplo, si no levantas los cojines del sofá para aspirar las migas, absolutamente nadie salvo se va a dar cuenta), otras tareas producen un enorme impacto visual y marcan la diferencia entre una casa ordenada y limpia y otra en la que, simplemente, no apetece mucho estar.
Pero ya antes de comenzar a preocuparte por el tiempo, desatiende, estas labores no te van a llevar más de 5 minutos, en verdad, hoy deseamos mostrarte cuatro de estos pequeños hábitos de orden y limpieza que deberías incluir sí o bien sí en tu lista de menesteres diarios.
LIMPIEZA
La rutina de 8 pasos para limpiar tu casa (y sin perder el tiempo)
1. Lavar los platos sucios al momento
Sí, sabemos que es un tradicional, y es posible que ya forme una parte de tu rutina, mas si no es así… ¡Se terminaron las disculpas! Lavar los platos en exactamente el mismo instante en que los llevas al fregadero va a hacer que la cocina siempre y en todo momento se sostenga limpia (algo esencial si recibes alguna visita de improvisto y deseas ocasionar buena impresión).
No solo eso, de esta manera ahorrarás múltiples minutos en el proceso de lavado, en tanto que no es exactamente lo mismo fregar un plato recién utilizado que ponerte a suprimir los restos de comida que se han quedado engastados en la superficie por el paso de las horas.
2. Sostener limpias mesas y encimeras
En tiempos de coronavirus, sostener una limpieza perfecta en mesas y encimeras cobra singular relevancia. Imagina que llegas del súper y dejas las bolsas sobre la mesa del comedor, exactamente las mismas bolsas que has apoyado en el suelo del portal para abrir la puerta y que ahora llenan de gérmenes la zona en la que después comerás…
Nuestro consejo es que siempre y en todo momento tengas a mano un bulto de toallitas multiusos, es una forma rapidísima de adecentar cualquier superficie sin dejarte llevar por la vagancia.
Otro ejemplo: Si la encimera de la cocina está pegajosa y pones un táper sobre ella, cuando vayas a devolverlo a la nevera asimismo vas a estar manchando la ménsula del frigo, dando sitio a un círculo vicioso de suciedad que te podrías haber ahorrado si limpiases las superficies toda vez que las utilices. ¡Son todo ventajas!
Cocina reluciente
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3. Plegar la ropa cuando concluye la secadora
No siempre y en todo momento es posible, mas plegar la ropa cuando acaba el programa de la secadora te va a ayudar a ahorrar tiempo de planchado. Considera que al doblarla mientras que todavía está calentita evitarás que aparezcan tantas arrugas (y vas a poder decirle adiós a esas montañas viles de ropa que vas amontonando en el cuarto de la colada). Bien sabes lo que afirma el refrán, no dejes para mañana… ¡lo que puedas plegar el día de hoy! 😜
4. Poner los zapatos en su lugar solamente quitártelos
Otro pequeño hábito de orden que va a suponer un alivio para tu psique es poner los zapatos en su lugar cuando llegues a casa y te pongas las zapatillas. En muchas ocasiones acostumbramos a dejarlos en el recibidor, y al final, lo único que logramos es organizar un festival de calzado y descontrol frente al que Marie Kondo se horrorizaría.
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