Reformistas: cinco consejos para supervisar tu ansiedad y el agobio

Cuando charlamos de la ansiedad en una reforma siempre y en toda circunstancia se se habla del agobio que pasa el usuario, mas jamás de la ansiedad y el agobio que pueden pasar los profesionales: Hay muchos factores del ambiente que asimismo pueden ocasionaros periodos de agobio, que os resulten bastante difíciles administrar.

ansiedad laboral

Las causas de la ansiedad laboral pueden surgir por cualquier factor, por ejemplo:

  • Los recursos económicos son deficientes para poder concluir el trabajo
  • No te sientes cómodo en tu ambiente de trabajo, así sea por las demandas del usuario, o bien del equipo de trabajo que te rodea
  • Sientes que el usuario no valora el ahínco y el trabajo que realizas
  • Salen imprevisibles que no contabas en tu planning de trabajo
  • No dispones de suficiente personal
  • Sientes que todo se desmanda a tu alrededor

La ansiedad en el trabajo, se expresa de forma diferente conforme el profesional. Ciertos síntomas más habituales son:

  • Problemas para dormir
  • Falta de aire, cefalea, palpitaciones, nudo en la garganta
  • Incapacidad de concentrarse o bien tomar decisiones
  • Pensamiento que algo puede salir mal o bien que ocurrirá algún imprevisible en cualquier momento
  • Falta de interés por efectuar un trabajo bien hecho
  • Obsesión por la rutina, por procurar tenerlo todo bajo control

Os dejamos ahora algunos consejos para manejar la ansiedad laboral.

Encuentra el origen de la ansiedad

Al igual que si nos duele una rodilla o bien la espalda procuramos qué ha provocado ese dolor y también procuramos solventarlo, debemos entender qué es lo que pasa a tu alrededor y cuáles son las circunstancias que provocan un ese estado, puesto que  la ansiedad o bien el estrés  no es más que un síntoma del  que nos informa que algo no marcha bien en nuestro sistema psíquico y que debemos tratado.

Nuestro cuerpo es sabio y nos informa de antemano de que una situación nos puede ocasionar ansiedad, en las reformas en muchas ocasiones es provocada por situaciones complejas como por poner un ejemplo tener hablar con el usuario sobre inconvenientes de la reforma o bien no saber cómo actuar ante las quejas y reclamaciones. 

Organiza el trabajo

Como ya sabéis por experiencia, los trabajos en la reforma se pueden organizar mediante un diagrama de Gantt. Distribuye los trabajos a lo largo del tiempo para tenerlos controlados, pon ciertas semanas más que puedan cubrir los imprevisibles que la reforma puede causar. De esta forma, reducirás el agobio por el tiempo de entrega.

diagrama gantt de una reforma

Define las labores: hazte listas

Organiza a tu cuadrilla y a ti por tareas pendientes en el día. Haz una lista de lo que se debe hacer y táchalas una vez efectuadas. Si cada trabajador sabe cuáles son las tareas que deben hacer a lo largo del día, te invitamos a poner las labores que resulten más fáciles al comienzo, así reducirás la ansiedad a sabiendas de que los trabajos se marchan sacando adelante y los objetivos se marchan cumpliendo

Como afirma el refrán “Divide y vencerás”

Ten tiempo para ti mismo

Es fundamental que cuando acabe la jornada de trabajo, centres tus pensamientos en otras actividades propias como, por poner un ejemplo, efectuar ejercicio entre treinta o bien sesenta minutos diarios. Esto te va a ayudar a aclarar tu psique y liberar tensiones. Si no es posible acudir a un gimnasio o bien clase dirigida, puedes salir a pasear para despejar la psique.

Habla con un profesional

Si ves que todo puede ir más allí, es esencial que charles con un profesional a fin de que te asista a administrar la ansiedad y te dé herramientas para poder soportar los ataques. Además de esto, una persona fuera de tu ambiente puede hacer que te sientas más cómodo en el momento de expresar tus sentimientos, pues no te juzgará.

Cada persona es un planeta y cada ansiedad puede aflorar de una forma diferente. Para lo que a ciertos un profesional es una tontería, para otros puede ser un planeta. No te abochornes por padecer ansiedad o bien algún ataque de agobio, es más normal de lo que crees y no de ahí que eres más enclenque. Recuerda que no debes callarlo, puesto que eso empeoraría la situación y produciría mayor agobio.

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