Quizá lo mío no sea lo común, mas la cuestión es que tras haber visitado París múltiples decenas y decenas de veces en los últimos cuatro años, jamás había sacado tiempo para ir a ver el Petit Palais, sede del Museo de Hermosas Artes de la urbe. En mi descargo afirmaré que con una competencia tan apabullante, con visitas prácticamente obligadas como las del Louvre, el museo de Orsay, el de Artes Decorativas por mentar solo tres (creo que he estado en cuando menos otra doce más como el Carnavalet, Picasso, Museo de la Vie Romantique, Fundación Louis Vuitton, Georges Pompidou…), el Palacio de Versalles o bien las decenas y decenas de exposiciones temporales que tienen sitio todos los años en la urbe, tampoco se me había ocurrido, la verdad… Mas esta vez había oído maravillas de la exposición temporal de Jean Michel Othoniel y me pareció la ocasión idónea para ver qué secretos escondía. Reconozco que fui a ciegas y me quedé desvariada por la calidad de lo que guardan ahí. Solo por los viejos vasos helenos de figuras negras y rojas que preservan ya merecía pasar múltiples horas recorriendo sus salas, mas es que hay desde prerrafaelitas a Roma vieja, estatua, pintura, mosaico y todas y cada una de las temporadas. De veras, si puedes ir, no dudes un segundo. Y encima es gratis!.
Así que el día de hoy sábado te dejo con una selección de las obras que más llamaron mi atención. Ciertas fotografías están hechas con el móvil, mas como esto a final es prácticamente un diario personal, deseaba que formaran una parte de este post… Y arranco con múltiples pinturas que me apresaron, firmadas por exactamente el mismo artista .
Y es que si tuviese que escoger un solo nombre entre todos y cada uno de los artistas con obra expuesta en el Petit Palais, me quedo con Fernand Pelez (mil ochocientos cuarenta y tres-mil novecientos trece), un pintor parisino de poca fortuna y éxito en vida, con unas obras de tipo costumbrista y ciertas de formato mural que me dejaron pasmada. Su “Grimaces et Misères” (muecas y miserias) conocido asimismo como Les Saltimbanques pintado en mil ochocientos ochenta y ocho y con más de seis metros de largo es completamente increíble. Y esta madre que amamanta a su bebé, sentada en plena calle rodeada de sus hijos que duermen a la intemperie de la que no logras separar la mirada por mucho que te muevas. Qué tristeza y qué bofetada de realidad.
Seguimos con cosas más alegres… En esa sala desde una muy elegante parisina al provocador y excelente Gustave Courbet con su Sommeil.
Si no sabes cuál es su obra “El Origen del Mundo”, L’Origine du Monde, citada en la cartela mira aquí. Una obra de mil ochocientos sesenta y seis que está encabezando una sala en el Museo de Orsay. Yeap.
En este último, lo que me desvarió fue el marco… Y ahora un tanto de prerrafaelismo que jamás viene mal.
Pero en el Petit Palais asimismo se muestran piezas tan variadas como joyas y mosaicos, estatuas y muebles. Acá una veloz selección de ciertas de mis piezas preferidas.
Voy a subir ciertos vídeos a los stories de mi cuenta personal en instagram por si acaso deseas echarles una ojeada. Te dejo con este link a su web
Fotos: Leticia Blanco | Vintage & Chic