Creada íntegramente en diferentes tonos de ese color tan indefinible como fantástico que en ocasiones es gris, en ocasiones beis, en ocasiones encuentro, en ocasiones un verde seco muy pálido… esta cocina transmite paz, elegancia, orden y calidez. Sí, me resulta cálida y, si no fuese por el grifo que asoma en el fondo y el extractor de diseño, podría ser una investigación de trabajo y hasta un vestidor. Tal vez sea el detalle en ondas del guardarropa que juega con el diseño de la isla central; tal vez los taburetes de madera o bien sencillamente sea la enorme rama de olivo que el estilista ha puesto ahí con maestría, mas es una cocina agradable y hermosa. Ah, esos estilistas sin cuyo trabajo indispensable y magistral, muchas casas parecerían otras …

Fotos: Derek Swalwell · Interiorismo: Kennedy Nolan