Barcelona estrena el Hotel Casa Sagnier, un nuevo establecimiento situado en la vieja vivienda del arquitecto técnico Enric Sagnier i Villavecchia (mil ochocientos cincuenta y ocho-mil novecientos treinta y uno), personaje señalado de la urbe y cuyas obras de estilo sintético y próximas al modernismo tuvieron gran aceptación en la vanguardia de la temporada.
Casa Sagnier: hotel hogareño, con historia y elegancia arquitectónica
No es muy frecuente que una persona pueda decir que ha dormido en un edificio simbólico. Y este es, justamente, uno de los reclamos más esenciales del Hotel Casa Sagnier, el estrenado establecimiento que termina de abrir sus puertas en Barna donde fuera la casa del arquitecto Enric Sagnier i Villavecchia (Rambla de Catalunya, ciento cuatro) y donde anteriormente funcionaba el hotel Murmuri. Convidada a la presentación de su apertura, la jornada contó con la presencia del cronista Lluís Permanyer quien ha hecho hincapié en la trascendencia de las obras del arquitecto técnico en la urbe de Barna, en su estilo sintético y en su figura profesional.
El Hotel Casa Sagnier es el segundo de la familia Pérez-Sala quien ya tiene el alojamiento Primero Primera, el que abrió las puertas en dos mil once en exactamente la misma urbe. Como ha sido el ánima del hotel Primero Primera, Casa Sagnier es un hotel boutique de categoría 5 estrellas “que quiere trasmitir la historia misma del establecimiento y de Sagnier y que busca que el huésped se sienta como en casa, que respire a hogar y que deje unir lo local con el visitante”, explicó Inés Pérez-Sala.

“Un proyecto de interiorismo pensado como lo hubiese hecho Sagnier”
El establecimiento hotelero cuenta con “6 plantas y cincuenta y uno habitaciones de diferentes tipologías. Entre ellas, seis son suites y una de estas es la Gran Suite que se sitúa en el espacio donde Sagnier tenía su despacho de arquitectura”, explicó Susana Flqué, Hotel Mánager en Casa Sagnier”. Además de esto ofrece una señalada oferta gastronómica merced al restaurant Cafè de l’Arquitecte, situado a pie de calle.
Para conseguir una oferta conforme respire la identidad de Enric Sagnier, la familia Perez-Sala ha contado con el interiorismo de TurullSørensen arquitectos, con el estudio Elefante (Eva Balart y Juan Carballido) y con el asesoramiento de Núria Pérez-Sala y Estrella Salietti.
Al respecto, Federico Turull de TurullSørensen comentó que su proyecto de interiorismo ha buscado dar sitio a aquello que sucede en nuestras residencias privadas, “las cuales se convierten conforme pasa el tiempo desde los usos que hacemos de ella”. En este sentido, se refirió a los entornos del hotel como “espacios que pueden ir mudando conforme el estilo de quien lo vive y visita y no de quien lo diseña”. Y agregó que “pensó el proyecto de interiorismo como lo hubiese hecho Sagnier“.

Sobre Enric Sagnier
La presentación para prensa dejó poner en la mesa la historia de Sagnier quien se recibió de arquitecto técnico a los veinticuatro años y cuyo primer encargo fue el Palacio de Justicia de Barcelona. Sagnier procedía de una familia famosa y de grandes intereses culturales que lo llevaron a tocar el violín y pintar. En lo que se refiere a sus obras, resaltaba en la temporada por el hecho de que “era un hombre de principios, una persona excepcional de genial trato y un profesional con una enorme adaptación a los clientes; muy elegante a nivel personal como en lo profesional”, explicó Javier Pérez-Sala Valls-Taberner.
Otra de sus virtudes es que “se amoldó de forma personal al modernismo lo que le llevó a ser el arquitecto técnico con más obras del momento. Al tiempo que Josep Puig i Cadafalch efectuó unas setenta y tres casas; Lluís Domènech i Montaner unas cuarenta y dos y Antonio Gaudí cerca de 23; Enric Sagnier efectuó cerca de cuatrocientos obras y fue merecedor de cinco premios”, compartió Luis Pérez-Sala Valls-Taberner.




